Es un proceso que permite al restablecimiento de un ecosistema, que fue perjudicado, se realizan las acciones necesarias para favorecer la recuperación, cuidando su salud, integridad y sustentabilidad. Luego de un análisis intensivo, se aplican diferentes técnicas y metodologías, tratando de salvar ambientes dañados, degradados o destruidos para preservar el ambiente, promover la biodiversidad y sostenibilidad. Se mejoran aspectos físicos químicos, económicos y culturales al proteger la naturaleza.
La restauración de los ecosistemas permite mejorar la calidad de vida de las personas, reduce el riesgo de desastres naturales y favorece el desarrollo sustentable.